A veces puede parecer complicado saber en dónde dejamos las llaves cuando en nuestra mente tenemos una gran lista de pendientes o actividades a realizar durante el día; o bien cuando nos preguntan qué cenamos hace una semana en aquella reunión con los amigos. Eso nos puede hacer cuestionarnos si realmente estamos perdiendo la memoria. Pero la realidad es otra, tu cerebro tiene la capacidad para recordar cada detalle; Nelson Dellis es el actual ganador del Campeonato de Memoria (USA Memory Champion). Dellis se propuso entrenar su mente después de ver padecer Alzheimer a su abuela. A continuación te presentamos algunas de sus técnicas:

 

Haz que todo sea emocionante.

La memoria funciona a base de estímulos por ello no se nos complica olvidar aquellas cosas que nos generan un aprendizaje o experiencia emocionante, cuando la mente experimenta cosas fuera de lo común las absorbe mejor, y perduran en nuestra memoria de larzo plazo. Desafía la emoción de hacer las cosas, por ejemplo si vas a ordenar una pizza, antes de probarla imagina la sensación del queso en tu boca, o la sensación de quemazón en la lengua al imaginarte que está muy caliente; imagina los olores, las texturas, los colores, etc., el objetivo es involucrar tus sentidos.

 

Crea un campo semántico

Realizas algo similar cuando vas al supermercado en tu cabeza realizas el ejercicio de la recreación, ves los elementos que hay en el refrigerador, de tu memoria depende si te vas a llevar la mayonesa o no. Crea una historia en la que los objetos o las tareas que no quieres olvidar vayan apareciendo uno tras otro. Entre más extraña sea tu historia, va a ser más fácil de recordar. “Recordamos lo que está totalmente fuera de lo ordinario”.

Presta atención 

Este es el primer paso para recordar algo. Nuestra atención es muy frágil. Sufre distracciones continuas, ahora más que nunca. Debes forzarte a mantenerte enfocado en una sola cosa a la vez. Supongamos que acabas de conocer a una persona y quieres aprenderte su nombre. Antes de preguntarlo, Dellis se pregunta a sí mismo varias veces, “¿cuál es el nombre de esta persona?”

 

Este sencillo proceso hace maravillas. Ya no recibes la información mientras piensas en lo que vas a responder o ves algo que te distrae. Estás enfocado en la persona frente a ti. Estás listo para recibir y almacenar su nombre.

 

Deja de anotar listas. Ejercita tu memoria y con ello también tu imaginación. Crea una historia, una frase, una situación nueva cada día. 

 

 

 

Fuentes: https://blog.jurgenklaric.com/5-trucos-para-no-volver-olvidar-algo-importante/